Feminismos

Economía Solidaria y con perspectiva de género en Asturies

Como recoge el diario El Comercio, el Institutu Asturies 2030 y la asociación Varagaña han abordado en Nava los retos de un modelo productivo centrado en las personas. En él se ha reivindicado a la Economía Social y Solidaria como «una economía que no se basa en el abuso sobre el territorio, si no que sea de […]

Buscador de noticias

  • Filtra por temática

  • Filtra por etiqueta (Ctrl+clic)

  • Filtra por tipo de contenido

  • Filtra por tipo de recurso

  • Orden de los resultados

Hugo Álvarez (El Comercio)

Como recoge el diario El Comercio, el Institutu Asturies 2030 y la asociación Varagaña han abordado en Nava los retos de un modelo productivo centrado en las personas. En él se ha reivindicado a la Economía Social y Solidaria como «una economía que no se basa en el abuso sobre el territorio, si no que sea de gente del mundo rural, en el mundo rural y para el mundo rural».

El Comercio, 27 de mayo de 2018.

Una economía social, solidaria y con perspectiva de género. El Institutu Asturies 2030 y la asociación Varagaña celebraron ayer en el llagar de Sorribes, en Nava, la primera sesión de unas jornadas que abordan la capacidad transformadora que este modelo económico podría tener en la región.

La primera en intervenir fue la investigadora Ángela Gómez de Ávila, que hizo hincapié en la importancia de desarrollar el ecofeminismo como contestación a la apropiación masculina de la agricultura y de la reproducción y señaló que «es un concepto que ya se está aplicando en algunos proyectos, aunque sea de forma subconsciente».

Junto a ella, Eva Martínez, del colectivo Varagaña, señaló la necesidad de transformar el modelo económico actual. «Hay que poner a las personas en el centro de la actividad y fortalecer redes de apoyo para los proyectos que persiguen este objetivo por encima del animo de lucro, es posible construir una economía que no se base en el abuso sobre el territorio, si no que sea de gente del mundo rural, en el mundo rural y para el mundo rural», añadió.

Por su parte, también participaron varios integrantes de cooperativas con una larga trayectoria en la economía social y solidaria. Fue el caso de María Oliva Martino, de la sociedad cooperativa Amieva, formada por 21 personas -veinte mujeres y un hombre-, que presta el servicio de ayuda a domicilio en Cangas de Onís, Onís y Amieva desde 1992. «A favor tenemos un servicio de calidad, en contra la insensibilidad de las administraciones que, por ejemplo, a la hora de contratar solo miran el precio por hora», apuntó.

Y Miguel Lastra, gerente de ASATA, comentó que «en Asturias hay 200 cooperativas y250 sociedades laborales que dan empleo a unas 5.500 personas; tendríamos que duplicar esta cifra para llegar a la media española, es una de las comunidades que menos apoyo ofrece». Asimismo, lamentó que aunque se han producido avances legislativos, «las políticas de impulso de la economia social carecen de financiación». No obstante, matizó que los ayuntamientos sí están teniendo cada vez más en cuenta estos modelos.

Por otro lado, Isabel Vilalba, del Sindicato Labrego Galego, y Verónica Sánchez, de la asociación Varagaña, hicieron hincapié en la importancia de la perspectiva de género en el mundo rural. «En la actualidad, se puede emprender pero entra en conflicto con las necesidades del mercado, el reto es generar alianzas entre proyectos y conciencia en la sociedad civil y las admnistraciones públicas», defendió Sánchez.

La jornada continúa hoy con la celebración de dos mesas de trabajo. A las once, se abordarán las claves para el análisis de la economía social en Asturias y a la una se presentarán propuestas de futuro.

Artículos Relacionados

----