Seguramente tendrá conocimiento de que Iberdrola y Endesa quieren reabrir Garoña y además instalar un almacén nuclear de residuos radiactivos en la cabecera del Ebro, el río del que dependen más agricultores, vinicultores, etc. que en ningún otro sitio.

Esta central se proyectó para 40 años y quieren alargarla 17 años más a pesar de las catástrofes humanas y económicas de Txernobil y Fukushima que han provocado 200.000 muertos, 500.000 desplaza-dos y más de 680.000.000.000 de pérdidas por ahora.

En el caso de accidente nuclear es mejor no pensar lo que nos podría pasar: se contaminaría el agua potable que bebemos de los pantanos del Ebro, Zadorra, Ordunte…, en todo el Ebro no se podría regar, el vino de la Rioja pasaría a bono basura…

Iberdrola y Endesa no van a realizar las reformas que ha solicitado la Unión Europea tras lo de Fukushima (modelo idéntico al de Garoña) porque gastarían 100 millones que es lo que quiere ganar con la reapertura. Otros países con sentido común han aprendido. Alemania va a cerrar todas sus centrales y Bélgica ha decidido cerrar dos centrales como las de Garoña-Fukushima por inseguras.

Es hora de decir BASTA. De decir a Iberdrola y Endesa que vamos a dejar de ser sus clientes si reabren Garoña. Y esto lo debemos hacer de forma colectiva, en masa, con energía y cuanto antes. Hasta ahora más de 5.000 personas nos hemos ido de estas dos empresas pero debemos llegar a 40.000 para que el boicot económico sea realmente importante.

Le enviamos esta información a su entidad con el fin de que, si lo estiman oportuno:

• Firmen como entidad el Compromiso para la Portabilidad  de que dejarán de ser clientes de Iberdrola-Endesa si reabren Garoña.
  
• Reenvíen a sus socios/as, empleados/as…esta información. Para ello les enviarnos una pequeña nota que se puede reenviar con los links para firmar también el manifiesto o si quisieran hacer ya la portabilidad, cómo se hace. También les enviamos el primer boletín informativo.
  
• O hagan lo que uds. estimen oportuno al respecto.

Muchas gracias por ayudar a no poner en peligro el futuro de nuestros hijos e hijas.