Consumo Responsable

“El regalo solidario existe”

Ante una fecha tan dada al consumo como la Navidad la economía solidaria puede ser la clave. REAS Euskadi es una red nacida en 1997 que agrupa a más de cuarenta empresas y entidades sociales que promueven una economía al servicio de las personas y su entorno. Hablamos con su coordinador, Carlos Askunze, acerca de […]

9 diciembre 2009

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Ante una fecha tan dada al consumo como la Navidad la economía solidaria puede ser la clave. REAS Euskadi es una red nacida en 1997 que agrupa a más de cuarenta empresas y entidades sociales que promueven una economía al servicio de las personas y su entorno. Hablamos con su coordinador, Carlos Askunze, acerca de conceptos como el consumo responsable, “un ejercicio más imprescindible que nunca debido a la difícil coyuntura económica y a la proximidad de las fechas navideñas, tan propicias al consumo desmedido”.

[Naiara BAZA] ¿Cuáles serían unas buenas pautas de economía solidaria?

El planteamiento que hacemos nosotros de la economía solidaria lo basamos en dos premisas que son aplicables a todos los meses del año. En primer lugar, consideramos que consumir menos y de forma responsable puede hacernos vivir mejor. Y, en segundo lugar, que los ciudadanos, las familias, las personas, tienen en su mano la posibilidad de hacer un acto de transformación social, de incidir en la marcha de la economía consumiendo productos fabricados o comercializados por empresas que trabajan con criterios solidarios, medioambientales o éticos.

¿Y qué dirían a quienes dicen que la salida de la crisis pasa por reactivar el consumo?

Si la crisis ha demostrado algo es que el sistema actual, tal y como está concebido, no es válido para cubrir las demandas sociales, y, sobre todo, que las decisiones económicas no recaen en los ciudadanos, ni siquiera en las propias instituciones públicas. Por eso, nuestra propuesta es la de cambiar la economía hacia una dirección más justa, más ética y solidaria…

En Navidad destinamos una parte importante de nuestro presupuesto a regalos. ¿Es posible el regalo solidario?

Existe, claro que sí, y es posible no sólo de cara a Olentzero o a Reyes sino siempre, ya que empieza a haber un buen número de productos y servicios que se pueden adquirir o comprar con criterios de consumo responsable, desde ropa, libros, productos alimentarios, muebles… Particularmente con los regalos navideños, yo recomendaría pensar si realmente es necesario regalar tanto y tan caro y si esos productos tienen que ser comprados convencionalmente o podemos sustituirlos por otros de comercio justo. Es desalentador ver la cantidad de paquetes que reciben los niños, tantos que pierden su valor. ¿Por qué no utilizar nuestra imaginación para regalar? Hacer algo de forma artesanal dice mucho más de la persona que regala que gastarse un dineral en un objeto.

Es también la fecha más intensa en cuanto a generación de residuos y a consumo energético se refiere. ¿Hay trabajo en este sentido?

Desde luego, y hacemos un llamamiento a ciudadanos e instituciones para que se reduzcan los niveles de consumo eléctrico. Para nosotros el medioambiental es un tema prioritario, tanto como el consumo responsable. Es preciso reflexionar y no cabe más conclusión que la de hacer decrecer nuestro gasto energético si queremos un planeta sostenible del que puedan disfrutar todas las personas.

Recientemente hemos asistido a la celebración del Día Sin Dinero o la Semana del Comercio y este año se ha inaugurado el Koopera Merkatua. ¿Es éste el camino?

Por supuesto. Cada vez es mayor la fuerza que tienen todas estas iniciativas que buscan otra forma de consumir, primero porque hay cada vez más personas que de una forma organizada trabajan en este ámbito y segundo porque el grado de insatisfacción de la ciudadanía es cada vez mayor respecto del modelo económico actual. Ambas cuestiones hace que proliferen proyectos como el Día Sin Dinero, la Semana del Comercio Justo, Día Sin Compras, Red Nekasarea, Banca Ética Fiare… y que la acogida también sea cada vez mayor. En noviembre nosotros hemos celebrado un seminario con el título Construyendo un mercado alternativo de economía solidaria, con una gran afluencia de público. De hecho, nunca antes había visto tanta energía en este sentido.

Ganas parece que hay, ¿y respaldo institucional?

Hay de todo, aunque sí es cierto que en Euskadi, en comparación con otros lugares del Estado, este tipo de iniciativas han obtenido un mayor respaldo. De todas formas, el apoyo siempre va a ser limitado porque estamos hablando de experiencias muy costosas que dependen, sobre todo, de la voluntariedad de la gente y mucho nos tememos que en estos tiempos de crisis se van a producir recortes en cuanto a subvenciones se refiere. Pero desde REAS no sólo solicitamos un apoyo económico a las administraciones sino que queremos que se impliquen también como agentes activos, que se conviertan en consumidores responsables y solidarios. En este sentido, se está trabajando mucho el concepto de compra pública ética y hay muchas cuestiones en las que las instituciones pueden colaborar, desde implementar políticas de reducción energética, de reciclaje de papelería, tóneres de impresora, impulso al comercio justo e incluso discriminar positivamente a las empresas solidarias en los concursos públicos.

NAVIDAD SOLIDARIA
Kontsumitzailearen Informaziorako Udal Bulegoa (KIUB)

Compra de regalos. Reflexionar sobre si realmente se necesita y, una vez adquirido, intentar averiguar cómo ha sido fabricado y si en su proceso de producción se ha perjudicado al medio ambiente o a algún ser humano.

Ahorro energético. Reducir al máximo la utilización del coche, conectar los aparatos a la red en lugar de usar pilas o desconectarlos cuando no estén en funcionamiento, ayuda a ahorrar energía.

Disminución de los residuos. Un 40% de la basura doméstica son residuos orgánicos, del resto, un 80% lo constituyen envases. Rebajar este porcentaje está en nuestras manos.

Ahorro de agua. Es un bien escaso así que es preciso no despilfarrarla. En este sentido, se recomienda, entre otras cuestiones, colocar dispositivos de ahorro en los grifos domésticos.

Alimentación ecológica y saludable. Se aconseja recuperar la cocina tradicional en detrimento de la comida basura o precocinada, que implica más envasado y consumo de energía.

Juguetes. Resulta inevitable, sobre todo a los niños, no sucumbir ante el bombardeo publicitario. Es posible, sin embargo, comprarles juguetes no sexistas ni bélicos y aquellos que estimulen su creatividad.

Árboles de navidad y otros adornos. Alrededor de dos millones de árboles acaban en la basura todos los años, provocando graves daños al medio ambiente. Otros adornos, como el musgo, muérdago o el acebo, se encuentran en grave peligro de desaparición debido a que están siendo recolectados de forma insostenible para su simple uso ornamental.

Dónde comprar. Las grandes superficies no son los únicos lugares donde poder comprar. Tiendas de barrio, de comercio justo, cooperativas de consumidores o mercados tradicionales son también opciones muy válidas.

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