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«La pandemia ha potenciado yacimientos de empleo vinculados a la ESS»

Entrevistamos a Jordi López, presidente de Mercat Social y secretario técnico de REAS Balears, en el marco de la campaña #LaClaveESSlaGente.

29 julio 2021
Balears

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Nos gusta arrancar esta serie de entrevistas a redes de REAS y la Economía Solidaria, haciendo un DAFO del estado de la red en 4 tweets ¿te animas a ello?

DEBILIDADES:
– Limitado sentido de pertenencia al sector y conocimiento de otras entidades entre parte del personal vinculado a las organizaciones asociadas.
– Poca diversidad de las actividades económicas y canales de comercialización a veces débiles
AMENAZAS: las presiones para priorizar la recuperación del modelo económico prepandemia en detrimento del necesario cambio de modelo
FORTALEZAS: consolidación de la secretaría técnica profesionalizada, crecimiento en la base social y en la capacidad de incidencia pública y presencial social
OPORTUNIDADES: la crisis del modelo provocada por la pandemia como estímulo para la potenciación de nuevos yacimientos de empleo vinculados a la ESS

Tradicionalmente ha sido muy fuerte el trabajo que habéis realizado en materia de reciclaje y recuperación y empresas de inserción, ¿cuál es el estado de ello actualmente?

Actualmente nuestro principal reto, como el de la mayoría de entidades de AERESS, tiene que ver con la recogida diferenciada de residuos textiles. La evolución del modelo de producción y consumo del sector textil en los últimos años está afectando a la viabilidad de su recogida diferenciada que realizan las entidades sociales de inserción. La ropa, con el fenómeno low cost, fast fashion, tejidos multifibra, etc., se está convirtiendo en los nuevos plásticos: crecimiento de los residuos producidos sin control, dificultades crecientes de recuperación… Todo ello afecta a la baja calidad y bajo potencial de aprovechamiento de la ropa recuperada, y provoca que su comercialización no permita cubrir los costes de recogida y tratamiento.

Esta situación se mantendrá unos años mientras no entre en vigor el sistema de responsabilidad ampliada del productor previsto en la ley de residuos que se está tramitando en el Congreso y mediante el cual se deberían financiar los costes de su recogida diferenciada y tratamiento.
Por todo ello estamos trabajando conjuntamente con las empresas de inserción de reciclaje y reutilización, fijando criterios económicos comunes para negociar con las administraciones y realizando incidencia pública para que estas asuman que la recogida de ropa tiene un coste que no pueden seguir asumiendo nuestras entidades, y más en Illes Balears, donde desde mayo de este año la ley balear de residuos establece la obligatoriedad de su recogida diferenciada por parte de los ayuntamientos.

En este sentido, el 8 de junio participamos en una jornada con el Govern, el Consell de Mallorca y ayuntamientos de Mallorca para abordar conjuntamente la problemática y diseñar posibles soluciones, basadas tanto en subvenciones que compensen los costes de recogida no cubiertos por la comercialización o licitaciones mediante contratos reservados que incluyan todos los costes del servicio.

Estáis enredadas en el proyecto Local ESS, para promover la economía social y solidaria y el desarrollo local en Mallorca, ¿de qué se trata y qué acciones estáis llevando a cabo?

En julio de 2020 Mercat Social Illes Balears firmó con todos los grupos políticos del Consell de Mallorca el pacto para el fomento de la economía social y solidaria y el desarrollo local, que contempla actuaciones en los municipios para promover la diversificación económica y la economía local.

Posteriormente, en 2021, se ha puesto en marcha una comisión de seguimiento del pacto y se ha habilitado una subvención nominativa de 30.000 € para desarrollar las acciones previstas, que incluyen actuaciones de asesoramiento y acompañamiento para favorecer la emprendeduría social y la actividad económica de la economía social y solidaria, actuaciones de formación y de sensibilización y visibilidad de la ESS. Esto lo hacemos con un enfoque municipalista y desde un local cedido por un particular, que acabamos de inaugurar.

Los últimos años habéis celebrado la Semana de Economías Transformadoras, ¿ en qué consiste esta propuesta? ¿Estáis trabajando en una nueva edición para este año?

Inicialmente la semana de economías transformadoras surgió en 2019 como un ciclo de actividades paralelo a la feria del Mercado Social de Mallorca con los mismos objetivos: favorecer la visibilidad pública y la intercooperación, aunque ha acabado adquuiriendo vida propia. Estas actividades, muy diversas, están organizadas tanto por Mercat Social como por las redes y organizaciones que forman parte del ecosistema local de la economía social y solidaria. Para finales de septiembre de 2021 estamos organizando la III Semana de las economías transformadoras, este año haciendo especial incidencia en la necesidad de desarrollar nuevos ámbitos de actuación, en sectores como el turismo, la agroecología, las comunidades energéticas locales o la reconversión a la ESS de empresas en riesgo de desaparición, a fin de contribuir a la necesidad puesta de manifiesto por la pandemia de diversificar nuestro modelo y favorecer la economía local.

¿Cómo se vive la promoción de la ESS en una isla? ¿Qué particularidades encontráis?

La principal particularidad es el peso del monocultivo turístico altamente globalizado que lo engulle todo y que se basa en decisiones lejanas que no controlamos. El debate social, político y económico está muy condicionado por esta realidad. El contexto de la pandemia favorece un discurso crítico, basado en la necesidad de diversificación y potenciación de la economía basada en criterios de desarrollo local, y esto facilita las alianzas con otros sectores sociales, que ven en la ESS un ejemplo de que aquí y ahora podemos dedicarnos a otras cosas y avanzar en el camino de una transición ecosocial. Eso si, con una fuerte tensión entre la urgencia de recuperar la actividad económica prepandemia basada en un modelo obsoleto y la importancia del cambio de modelo, hacia una economía más diversificada y resiliente, que provoca que a menudo se priorice lo más inmediato y no lo más necesario.

¿Algo más en el tintero que queráis comentar?

La participación en plataformas sociales surgidas a raíz de la pandemia, como La Vida Al Centre o el Fòrum de la Societat Civil, basadas en la necesidad de construir un modelo económico resiliente, equitativo y sostenible, están favoreciendo las alianzas con otros sectores sociales y la percepción de la ESS como un actor fundamental para la transición ecosocial que necesitamos.

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