Con 6.800 habitantes, el municipio de Cajueiro da Praia es sólo un satélite de Parnaíba, polo económico ubicado en la región norte de Piauí, que tiene 150 mil habitantes. En busca de mayor autonomía económica y procurando fortalecer el desarrollo de la comunidad local, se creó el último día 11 de junio, el Banco Caju da Praia, en la ciudad litoral de Cajueiro da Praia, situada en la frontera entre Piauí y Ceará.

La economía local está basada en la pesca y en la agricultura. El Banco Caju da Praia tiene el objetivo de postergar la fuga del dinero desde la comunidad hacia los centros económicos más evolucionados, como Parnaíba. En este otro municipio, también fue inaugurado, la semana pasada, el Banco Semear, dentro de la misma perspectiva. «Nosotros queremos concientizar a la población para que postergue la salida del real hacia otros centros y, así produzca más riqueza dentro del municipio», resalta Víctor Hugo Saraiva, de la Care Brasil.

Asesorado por el Banco Palmas, de Ceará, el Caju da Praia es el tercer banco comunitario de Piauí y es parte de una red que cuenta con la participación de 26 instituciones basadas en los principios de la Economía Solidaria. La moneda social, el cajueiro, comenzó a circular este lunes (16).

De acuerdo con Víctor Hugo, cerca de 800 cajueiros ya circulan en la comunidad. «Esto fue una característica distintiva del banco, pues las otras instituciones no consiguieron ese número en sólo tres días. Sin contar que el efecto multiplicador de la moneda también es significativo, porque ella no queda parada, sino que pasa del comerciante al consumidor y viceversa», afirma.

La metodología del Banco Caju da Praia es similar al del Banco Palmas. Además de financiar el consumo, el banco debe ofrecer apoyo a los comerciantes locales. El banco sólo va a poder operar con fuerza total en seis meses, por medio de un financiamiento del Banco Popular de Brasil. Sin embargo, algunas líneas de microcrédito ya están siendo liberadas para grupos específicos. Una huerta comunitaria basada en los principios agroecológicos, una cooperativa de frutos de mar, talleres de artesanías y cooperativas de costureras son los proyectos en marcha.

Hace dos años, comenzaron los debates y los seminarios con la participación de los habitantes de la región. Fue realizado un diagnóstico del consumo y producción locales. Fue constatado que la región litoral de Piauí es económicamente vulnerable. «Actualmente, hay un ensayo de desarrollo del turismo en la región, reproduciendo el modelo predatorio que ocurre en el Nordeste. La compra de tierras por extranjeros ya es una realidad. Un grupo de españoles compró el 68% de Ilha Grande con la finalidad de construir un resort, expulsando a las comunidades locales», informa Víctor Hugo.

El Banco es parte de un proyecto más amplio, ya que se inserta en el Núcleo de Ampliación de Valores Económicos y Sociales Locales (Naves), que integra el proyecto de la Alianza Mandu (Movimiento de Articulación Norte Piauiense para el Desarrollo Sustentable), formada por la CARE Brasil, Universidad Federal de Piauí (UFPI), Instituto Floravida, Embrapa Medio-Norte y Fundación Kellogg.