En el marco del Día Mundial Sin Compra, celebrado el 23 de noviembre, REAS y SETEM/Campaña de Ropa Limpia escenificaron dos acciones de denuncia, en La Morea y en la Avenida Carlos III, mientras distribuían una octavilla de sensibilización entre asombrados viandantes y los aplausos de apoyo.

En las octavillas que repartieron se animaba a consumir productos locales, interiorizar las tres ‘R’ (Reducir, Reutilizar, Reciclar), acudir al pequeño comercio antes que a las grandes superficies y distinguir entre lo necesario y lo que la publicidad nos impone.

El Día Mundial Sin Compra se celebra el viernes 23 de noviembre. El Buy Nothing Day se impulsó por primera vez en 1992 desde Canadá por Ted Dave un trabajador del mundo de la publicidad quien estaba especialmente sensibilizado desde su ámbito de trabajo sobre la peligrosa e incesante cultura del sobreconsumo, impulsada «sin filtro» a través de millones de mensajes publicitarios. El lema que Ted nos propone es “lo bastante es suficiente”. Un discurso por la sobriedad que parece una amenaza revolucionaria en tiempos de consumo compulsivo, especialmente antes de navidad.

Cada año, activistas de decenas de países se suman al DSC para realizar diferentes acciones y actividades que ayuden a la sociedad a reflexionar sobre nuestra conducta consumista.

«Desde REAS Navarra (Red de Economía Alternativa y Solidaria) y SETEM/Campaña de Ropa Limpia queremos posicionarnos claramente en una denuncia a la cultura del sobreconsumo. Debemos abandonar algunas formas de consumo que nos degradan y perjudican a terceros, moderar el consumo de los bienes que no son básicos, boicotear a las marcas envueltas en prácticas explotadoras e insostenibles….», señalan.

El Día Mundial Sin Compra es algo parecido a un día de huelga del consumidor, un plante frente a la sociedad de consumo. Se invita en ese día a toda la población a no acudir a comercios y grandes almacenes, a reducir al máximo las compras de esa jornada, a evitar las compras, y a salir a la calle para denunciar un sistema que se come el planeta y no tiene otra salida que un cambio de modelo socioeconómico.