Son múltiples los estudios que muestran cómo las empresas de economía solidaria resisten mejor en tiempos de crisis. No sólo destruyen menos empleo sino que tienen una mayor capacidad para adaptarse a las condiciones del mercado, ajustar los salarios y las condiciones laborales a la reducción de los ingresos de la empresa. No en vano la Guía de propuestas de la Economía Solidaria frente al COVID’19, que fue promovida por la red en los primeros tiempos de pandemia, ha tenido un amplio seguimiento e impacto, aunando ya a más de 120 experiencias y habiendo tenido importante eco en redes sociales y otras guías de recursos y boletines informativos.

Esto ha quedado patente en la asamblea general de REAS Red de redes que ha tenido lugar el pasado día 19 de junio, donde se han celebrado el 25 aniversario de la red, una larga trayectoria que la ha convertido en el principal agente de la Economía Solidaria del Estado. Esto es posible gracias a su amplia base social, articulada a través de sus 15 redes territoriales y 4 sectoriales, conformadas éstas últimas por organizaciones clave como: la Coordinadora estatal de Comercio Justo, la Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria, Unión Renovables y la Mesa Estatal de Finanzas éticas, y que integran a un total de 800 empresas y 50.000 personas.

La red crece cada año, tanto a nivel cuantitativo, como demuestran los datos del último dossier de la red confederal , como a nivel cualitativo y de impacto, lo que se refleja en la amplia Memoria de RdR 2019 presentada en este encuentro y donde han sido recogidas las principales actividades realizadas por las redes el pasado año en materia de contratación pública responsable, relaciones institucionales o promoción de las finanzas éticas o el consumo responsable.

La Economía solidaria está cada día más presente, además, en la vida cotidiana de un mayor sector de la población, diversificando sus propuestas y atendiendo cada día más a las necesidades sociales. Un buen ejemplo de esto es la nueva incorporación a la red de su quinta red sectorial, cuyo ingreso ha sido formalizado en la jornada de hoy: el Grupo Sectorial de Vivienda Cooperativa en cesión de uso. En palabras del propio grupo “el cooperativismo y la economía solidaria ha impulsado diferentes propuestas e iniciativas de vivienda colaborativa y, especialmente, el impulso de la vivienda cooperativa en cesión de uso”, modelo que “supone un cambio de paradigma respecto los modelos tradicionales de vivienda cooperativa y de promoción pública de VPO de venta. Supone una forma de incrementar la vivienda asequible a largo plazo al mismo tiempo que favorece otra forma de habitar más comunitaria, sostenible y comprometida con la economía social y solidaria”.

Otro de los reflejos de la madurez de este modelo económico alternativo viene de la mano de su propuesta de confluencia con otras alternativas de economía transformadora, como las de los movimientos feminista o ecologistas, y que se vienen articulando de manera especial en los últimos dos años entorno al Foro Social Mundial de Economías Transformadoras.

Este encuentro, que tuvo un evento previo organizador el pasado año con representación de todo el mundo y que iba a tener lugar a finales este mes en Barcelona, ha sido adaptado a formato virtual y tendrá dos periodos de realización la semana próxima y finales de octubre, y que contará con un amplio y rico programa, con propuestas y figuras clave del movimiento de los 5 continentes. El objetivo de fondo de estos dos encuentros, así como del proceso de confluencia comenzado en 2018 no es otro que “avanzar en una agenda común y acercar los movimientos sociales que comparten la voluntad de poner en el centro de la economía a las personas y el medio ambiente y acabar con la economía basada en la extracción, el crecimiento, la competitividad y el mercado, y que luchen por caminar hacia sociedades resilientes y colaborativas que construyan y refuercen alianzas y acciones estratégicas a base de trabajar conjuntamente”, como declaran fuentes de la propia organización.

Los requerimientos virtuales de celebración de esta Asamblea General no han teñido la voluntad de celebración por los 25 años de la red, donde se quiere compartir el orgullo y satisfacción ante esta larga trayectoria promoviendo un marco económico más justo, solidario y sostenible, que pone en el centro de su actividad las personas y el planeta. Ésta ha sido la línea central de otras acciones ya realizadas a lo largo de este año de aniversario, como la campaña como #PorUnaEconomíaSinVirus, donde las propuestas de la Economía Solidaria tuvieron una amplia cobertura en diversos medios de comunicación o la revista ESS Manía, editada con motivo de los 25 años, y cuyo primer ejemplar estuvo centrado en un especial “Pandemia Solidaria” frente al COVID’19, contando con significativos aportes de economistas como el argentino José Luis Caraggio o Amaia Pérez Orozco así como de otras figuras clave como Álvaro Porro, del Comisionado de Economía Social, Desarrollo Local y Consumo del Ayuntamiento de Barcelona, o Jordi García, escritor y referente del cooperativismo. Para concluir este encuentro de REAS Red de redes, ha tenido lugar una Fiesta virtual, en la que decenas de personas han bailado para celebrar en colectivo el importante hito de llevar 25 años caminando en red por una economía más justa, solidaria y sostenible.