Políticas Públicas

Cooperativas de la República Dominicana advierten colapso «economía solidaria»

La economía solidaria que es promovida por las cooperativas podría disminuir su influencia en el auge de soluciones a los problemas de los sectores de menos ingresos económicos, si quedan desprotegidas por la Constitución y pasan a ser reguladas por la Superintendencia de Bancos en la libre competencia en el sector financiero del país. Los […]

10 septiembre 2009
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La economía solidaria que es promovida por las cooperativas podría disminuir su influencia en el auge de soluciones a los problemas de los sectores de menos ingresos económicos, si quedan desprotegidas por la Constitución y pasan a ser reguladas por la Superintendencia de Bancos en la libre competencia en el sector financiero del país.

Los aportes de las cooperativas en el país es de un movimiento económico de alrededor de 60 millones de pesos.

También la generación de 60 mil empleos y más de dos millones de soluciones al año, podrían perderse a causa de las intenciones de algunos sectores de que sean regidas por la Ley Monetaria y Financiera.

El movimiento cooperativo de la región del Cibao, está muy preocupado por las consecuencias que traería a ese sector las marcadas intenciones de colocar estas instituciones de la economía solidaria en las mismas condiciones que la banca privada.

El problema radica en la desprotección constitucional, insisten los líderes de ese sector, encabezado por el presidente de la Federación Regional de Cooperativas del Cibao (FECOOPCEN), Eddy Alvarez, Narciso Vargas, Alejandro López, Rodolfo Reyes, Eulogio Mendoza y Francisco Martínez.

Hay dispositivos aprobados en primera lectura en el marco de la reforma a la Constitución, donde se retira el término protección y se sustituye por el de libre competencia, con lo cual las cooperativas pasarían a recibir el trato impositivo y las regulaciones de la Superintendencia de Bancos, en lugar de estar a cargos del Instituto Dominicano de Crédito Cooperativo IDECOOP y por la Ley 127.

Siendo así las cooperativas dejarían de cumplir su función de operar como un factor de estabilización social ante la crisis y que permite resolver cuestiones prioritarias al 30 por ciento de la población pobre.

La República Dominicana cuenta con alrededor de 750 mil cooperativas que generan miles de empleos directos. Los indirectos no han sido cuantificados, pero son muchos.

La protección Constitucional

Además, de la ley 127 del l964, creada exclusivamente para regular el funcionamiento de las cooperativas, la Constitución de la República protege ese sector. El artículo 8 en los numerales l3 y l4 se refiere a la protección que ofrece a las cooperativas.

Los dirigentes de las cooperativas del Cibao, integrados en la Federación Regional de Cooperativas del Cibao (FECOOPCEN), advierten que quitar esa protección y permitir que las leyes impositivas regulen el funcionamiento de este sector sería la destrucción de la economía solidaria.

Pero además, la República Dominicana se establecería como el único país en el Caribe, América Latina que grava el funcionamiento de las cooperativas en las mismas condiciones que el sector financiero.

A los congresistas de Santiago

Los cooperativistas pidieron a los congresistas del Cibao que defiendan las cooperativas rechanzando la desprotección constitucional aprobda en primera lectura en el conocimiento de la Reforma a la Constitución.

Los conceptos de preocupación de las cooperativas fueron expuestos en el marco de una visita de cortesía al director de este diario, lienciado Enmanuel Castillo.

«Nosotros atendemos el 30% de la población más pobre, que por sus condiciones no puede aplicar al sistema financiero formal y operamos con gran transparencia y efectividad en una actividad que beneficia indirectamente a tres millones de personas, por intermedio de los 750 mil socios que se benefician de nuestro sistema en el cual no hay un grupo dueño del capital, sino que el patrimonio es colectivo», agregaron.

Tanto Alvarez, como Vargas, este último presidente de la Cooperativa La Altagracia, entienen que los congresistas deben defender el actual status de las coopertivas, porque es lo mismo que defender los intereses de los pobres y marginados del país que tienen acceso a crédito en este sector.

Los cooperativistas entienden que los legisladores deben situarse como genuinos representantes del sentir popular, votando a favor de la protección del cooperativismo en la República Dominicana.

Las gestiones del cooperativismo beneficia al comercio, pequeña y mediana empresa, entidadades comunitarias y otros sectores de la economía informal», pusieron de manifiesto los representantes del Cibao Central de las cooperativas.

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