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Nace la Escuela de Activismo Económico

Luis Esteban Y Rubio, integrante de Ecooo, del Mercado Social de Madrid y del Think Tank Ecopolítica, doctorando en Filosofía del Derecho (UC3M), escribe este artículo en nuestro blog en El Salto.  Como señala Martha Nussbaum en su obra Sin fines de lucro: “en la época en la que las personas comenzaron a demandar el autogobierno democrático, […]

8 noviembre 2019

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Luis Esteban Y Rubio, integrante de Ecooo, del Mercado Social de Madrid y del Think Tank Ecopolítica, doctorando en Filosofía del Derecho (UC3M), escribe este artículo en nuestro blog en El Salto

Como señala Martha Nussbaum en su obra Sin fines de lucro: “en la época en la que las personas comenzaron a demandar el autogobierno democrático, todos los países del mundo cambiaron sus modelos de educación para generar alumnos que pudieran funcionar sin problemas en esta forma de gobierno tan exigente. No se aspiraba a formar caballeros cultos, cargados de sabiduría inmemorial, sino personas activas, críticas, reflexivas y empáticas capaces de vivir en una comunidad de iguales y de intercambiar ideas sobre la base del respeto y la comprensión con otras personas de orígenes muy variados”. En la actualidad, en una época en la que un grupo creciente de personas seguimos poniendo de manifiesto la importancia de extender ese autogobierno democrático al ámbito de la economía y la empresa para lograr hacer frente a los grandes retos de nuestro tiempo (crisis ecológica, intensificación de las desigualdades sociales, crecimiento de las tendencias autoritarias, etc.), parece ser necesario el desarrollo de un modelo de educación económica y empresarial que genere un alumnado que pueda funcionar en un modelo de consumo y de producción alejado del capitalismo, y cercano a la economía social y solidaria.

El modelo de consumo del capitalismo encuentra su máxima simbólica en la posición que Paul Mazur, uno de los socios históricos de Lehman Brothers, defendió en 1927 (en pleno desarrollo de la sociedad de masas y de consumo) en la Harvard Business Review (una de las principales revistas empresariales del mundo): “debemos desviar Estados Unidos de una cultura de las necesidades a una cultura de los deseos. La gente debe ser entrenada para desear, para querer nuevas cosas incluso antes de que las viejas hayan sido enteramente consumidas. Debemos moldear una nueva mentalidad en los Estados Unidos. Los deseos del hombre deben eclipsar sus necesidades”. Con ello el capitalismo pretende lograr, a través de un uso abusivo del marketing y la publicidad, que sea la oferta la que, en la mayor medida posible, genere la demanda. Frente a esta visión, la economía social y solidaria se apoya en tres principios fundamentales en lo que respecta al consumo: en primer lugar, la importancia de distinguir entre necesidades y deseos; en segundo lugar, el consumo de bienes y servicios debe estar orientado a la satisfacción de las necesidades y no de los deseos; y por último, el consumo de esos bienes y servicios debe realizarse desde la moderación. Con ello la economía social y solidaria busca más bien fomentar que sea la demanda la que, en la mayor medida posible, genere la oferta.

Por su parte, y con respecto al modelo de producción, las empresas capitalistas tienen como principio esencial la maximización de beneficios, aunque para ello tengan que vulnerar los derechos laborales, aumentar las desigualdades sociales y las desigualdades de género, o agravar la crisis ecológica. Frente a esta visión, las empresas de la economía social y solidaria sitúan los derechos humanos de las personas, el bien común de la sociedad y la sostenibilidad del planeta en el centro de su producción de bienes y servicios. Igualmente, y mientras las empresas de la economía capitalista siguen de forma general una organización jerárquica y no democrática, las entidades de la economía social y solidaria apuestan por una organización horizontal y democrática sin perder su funcionalidad.

De esta forma, y como se puede observar, la persona consumidora y trabajadora de la economía social y solidaria necesita un modelo de educación diferente al de la persona consumidora y trabajadora de la economía capitalista. Sin embargo, la mayoría de Escuelas de Negocios y Facultades de Economía y Empresa en nuestra península forman cada año a su alumnado únicamente en una visión capitalista de la economía y la empresa, reproduciendo así con ello en las nuevas generaciones las dinámicas del sistema económico imperante. Por este motivo, y con el objetivo de poner nuestro grano de arena en darle la vuelta a esta situación, y acompañar así también en su misión a programas como el Máster en Economía Social y Solidaria de la Universidad del País Vasco, el Máster en Economía Social de la Universidad de Valencia o el curso de Experto en Gestión y Promoción de Empresas de Economía Social y Solidaria de la Universidad Complutense de Madrid, ponemos en marcha la Escuela de Activismo Económico.

Dicha Escuela busca ser un espacio de colaboración, creatividad y acción para atraer y formar en economía social y solidaria a la juventud universitaria a través de la metodología learning by doing (aprender haciendo). Esta metodología, en el caso de la Escuela de Activismo Económico, se concreta en un programa de tres actividades. En primer lugar, y como actividad principal, el alumnado participará en el funcionamiento diario de alguna de las tres entidades de la economía social y solidaria que actualmente forman parte de dicha Escuela (La OsaFiare y Mercado Social de Madrid). Igualmente, y antes de ello, el alumnado asistirá a tres sesiones de formación inicial donde, de manera dinámica, se pondrán las bases para el óptimo desarrollo de la actividad principal. Por último, y a su vez, durante la realización de la actividad principal se llevarán a cabo sesiones periódicas de acompañamiento para compartir experiencias, píldoras informativas y que el alumnado pueda disfrutar de un espacio donde continuar tejiendo lazos entre el mismo.

De esta forma, y con este programa, la Escuela de Activismo Económico pretende así ofrecer una educación económica y empresarial a la juventud universitaria para que ésta pueda llegar a funcionar de manera fluida en el modelo de consumo y de producción que necesitamos para abordar de manera integral y satisfactoria los retos de nuestro tiempo: el modelo de la economía social y solidaria.

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Para más información, y para inscripciones, visita la web de la Escuela de Activismo Económico: http://escueladeactivismoeconomico.org/

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